lunes, 25 de febrero de 2013

Alexis no impresiona

     No hablaré de datos, sino de impresiones. La impresión que dio Alexis al llegar al Barcelona fue buena; muy buena. Debut al más alto nivel, como titular, contra el Real Madrid y jugándose el primer titulo de la temporada. Sin conocer casi a sus compañeros se fajó, corrió, colaboró, fue generoso y dribló; ni mucho ni poco, como las cosas necesarias, lo hizo en su justa medida. Esa era su principal cualidad, el desborde, y en su presentación oficial como azulgrana se encargó de demostrarlo. Por eso llegó al Barça y encandiló a Guardiola, que presionó al club cerrándose en banda y obligando a realizar un desembolso de más de 40 millones de euros por un chico de apenas 22 años.

     Lo cierto es que ahora, en su segunda temporada en Can Barça, el chileno no ha terminado de demostrar el por qué de su fichaje. Continuando con las impresiones, impresiona ver cómo ha perdido su seña de identidad. Recibe, levanta la cabeza y la suelta al primer toque; no mira ni tantea al rival. Nunca busca portería, su mirada está siempre puesta en Leo. Su apodo, 'Maravilla Sánchez', no tiene nada que ver con la manera de tirar paredes o asistir a sus compañeros. Desde siempre, Alexis encaraba, fintaba, se iba y después, buscaba. Ahora ya no. Su trabajo es encomiable pero entre sus funciones entra también la de ver puerta con relativa frecuencia, cosa que, hoy por hoy, no hace.

     Sus 24 primaveras hacen que su progresión sea todavía una incógnita. Llegó como una promesa, y como tal, la confianza con él está siendo mayor que con muchos otros jugadores. Los más de 40 millones que costó son, en gran parte, los responsables de que, al menos a día de hoy, siga gozando de más minutos de los que realmente merece. Es combativo, generoso y desprendido. Maneja ambas piernas, crea espacios y habilita jugadas. Cualidades tiene pero, sin buscar la portería es imposible anotar, nos pongamos como nos pongamos. Ahora bien, si a su trabajo defensivo y su brega les suma esos 14-16 goles en Liga (este año lleva uno) que se le han de "exigir" a un delantero secundario de un equipo goleador como el Barça, podrá terminar de justificar su fichaje y cerrará de un portazo todo el runrún que ha surgido a su alrededor. Pero bien, mientras las cosas sigan así, parece, vaya, que da la impresión de que Alexis no impresiona.

miércoles, 13 de febrero de 2013

Ganar, ganar o ganar


     El Madrid se enfrenta esta noche ante un rival al que hace 11 años que no vence: él mismo. Hay que echar la vista muy atrás para recordar aquella volea con la que Zidane convirtió un balón que bajaba con nieve desde el cielo de Glasgow en el que posiblemente es el mejor gol de la historia de la Champions.

     Hoy, muchos años, fracasos y entrenadores después, los pupilos de Mou vuelven a tener una ocasión para alzar la voz y demostrar que siguen siendo uno de los gallos de Europa. La primera oportunidad se perdió el año pasado, en casa y desde los 11 metros. Este año el equipo está lleno de urgencias, y la Copa de Europa es el caramelo que les puede endulzar la temporada. Todavía es febrero y queda más de media competición, pero el partido de esta noche es el primer Match Ball de la temporada. Los resultados en Liga no son buenos y la afición sigue aguantando los desplantes y marrullerías de un entrenador que se sostiene por ser el único que les puede conseguir la ‘Orejona’. Ahora mismo, Mourinho tiene licencia para hacer y deshacer, quejarse, enfadarse o castigar; desde arriba se le permite todo porque el verdadero objetivo de la temporada es conseguir esa tan ansiada “Décima”, y si se logra todo lo demás quedará supeditado a un segundo plano.
En frente estará el Manchester, un habitual en las rondas finales de Champions, con un entrenador veterano y experto, una gran plantilla y ganas de demostrar que los clubes ingleses no tienen nada que envidiar a los españoles.

     Sin duda será un duelo de altura, posiblemente el enfrentamiento más atractivo de estos Octavos de final. La expectativa ya está creada, dos históricos del fútbol mundial vuelven a encontrarse muchos años después, con el último enfrentamiento aún en la retina de muchos, en una exhibición de Ronaldo en el ‘Teatro de los sueños’ con Hat-trick incluido. Hoy, la responsabilidad cae sobre otro Ronaldo, de apellido Cristiano, con pesado ‘Red’ y muchas ganas de seguir demostrando el excepcional estado de forma en el que se encuentra.

     A los demás, simplemente nos queda acomodarnos y centrarnos en disfrutar del gran espectáculo. Señores, que empiece el espectáculo.